Otro gran torneo de Sergio. Es cierto: no lo ha ganado, pero me parece que en el campo de el Doral pocos jugadores van a poder con Tiger Woods. Es un campo en el que hay que combinar todas las facetas del golf, y en el que la distancia pesa bastante. No sólo por los cuatro hoyos con par 5, sino también porque algunos de par 4 son bastante cortos y, pegándole duro como Tiger, se puede estar bastante cerca del green tras el primer golpe.
Sergio ayer salvó situaciones dificiles con el pitch y con el putt, como cuando se fue al agua en el hoyo 3 y se libró del doble bogey con un putt de 4 metros. Hizo bien las salidas de tee aunque fue poco preciso con el segundo golpe: quizá esa habría sido la clave para pelear por el torneo: un poco más de acierto con el palo de llegada al green.
En resumen, un gran tercer puesto en un torneo en el que estaban los 50 mejores del mundo. Sergio ha encadenado tres torneos de buen nivel. Está recuperando posiciones en el ranking mundial y, sobre todo, ha demostrado que está ahí: dispuesto a dar batalla cuando cuenta, cuando de lo que se trata para ganar es de tener calidad.
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