Es así como Sergio debe jugar: sólido. Segundo en llegadas al green (solo Tiger hizo mejor), ayer no falló con el putt, y el resultado es claro: cuatro bajo par y situado en los puestos de cabeza. Lástima de ese golpe malo en el hoyo 15 que le costó un bogey.
Ahora hay que mantener la concentración. Yo diría: seguir llegando bien al green. Y a ver que pasa.
Es verdad que a Tiger dificilmente se le va a escapar este torneo que se juega a 10 minutos de donde vive y que ha ganado en un montón de ocasiones. Pero... pero... ¡a ver que pasa!
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